He escuchado que has encontrado al amor de tu vida, que vais bastante enserio, que la miras y sonríes y te brillan los ojos. He escuchado que ahora eres fiel, que susurras su nombre cuando tienes miedo, que estás pensando en una vida juntos, en nombres para vuestros hijos y en recorrer mundo.
Y yo, que tengo tendencia al recuerdo, últimamente tengo frío, estoy nerviosa y no he parado de beber. Todavía recuerdo cuando escribías mi nombre en los cristales empañados, cuando me gritabas "te quiero" desde el otro lado de la calle. Sigo sintiendo ese escalofrío que recorría mi cuerpo cuando tocabas mis puntos débiles o como te reias cuando decía alguna de mis tonterias.
Hoy me apetecía escribirte que ya no dueles, que tu ausencia ya no me causa ninguna arritmia, que he logrado controlar la respiración cuando te veo, que ya no eres protagonista de mis sueños.
Pero sigo recordando como brillaba tu pelo cada vez que el sol te da va los buenos días, sigo recorriendo las calles por las que cómplices, nos besamos hasta altas horas de la noche. Todavía recuerdo la manía que tenías de recordarme siempre que no eras mío, y los celos tontos que te entraban cuando veías a otro bailado entre mi falda.
Ahora me han dicho que te has enamorado de una chica con una sonrisa preciosa, que la quieres y no puedes vivir sin ella. Supongo que los dos hemos seguido al tiempo, yo eh aprendido a ser felíz sin ti y tú, a ser felíz con otra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario